Esa mujer, esa misma, bajá aquí, la mirada y lee: se llama Angie Sanselmente Valencia, colombiana, llegó a Argentina en diciembre, no para salir conmigo, ni con vos, cerrá la boca: es una narcotraficante.

Semejante avión, tenía pedido de captura internacional, pero no la encontrado, desapareció del hotel donde se alojaba, 4 estrellas, el hotel, no ella.

Ella tiene como 10 estrellas.

Pretendía montar sus operaciones aquí, porque parece que Argentina hace rato que es ruta de la droga.

Parece que era la mujer de un narco mexicano muy conocido al que llamaban el “el Monstruo”, de manera que a esta mujer no sería raro que le dijeran la “Mostra”, es un monumento la Mostra.

Dicen que ganó un concurso de belleza, “La reina del café”.

Una de las cosas que no debe haber aprendido es que si queres ser delincuente no debe llamar mucho la atención, esa mujer debe haber tenido encima los ojos de todo el mundo, con semejante monumento a la vista a quién le importa si en la cartera llevaba rocas.

La descubrieron porque una “soldado”, intentó pasar por Ezeiza, no sé cuántos kilos de cocaína, eso alertó sobre la banda.

De este afaire (cómo veo tv.), son los delincuentes que se suicidaron tirándose de un edificio en diciembre, los de la calle Virrey Loreto al no se cuántos.

Ahora dice que para evitar ser detenidos, pero, uno sospecha, capaz que los tiraron para que no cantaran, al ser descubiertos.

El tema es largo, había chicas lindas y involucradas, tipos que conseguían las mujeres, todo lo necesario para filmar una película: Bella y delincuente.

Lo que queda por investigar: la droga no estaba oculta en el maletín encontrado, estaba a simple vista, eso hace sospechar que tenían cierta seguridad de pasar sin ser revisados, pero algo no se dio.

Si alguien faltó ese día a la aduana por causas naturales, o de enfermedad, ya saben quién es el cómplice en aduana.